jueves, 17 de marzo de 2011

LOS TURDETANOS

Muchas han sido las culturas que han habitado la Península Ibérica, dejándonos fantásticos legados; arqueológicos, culturales, arquitectónicos, todas tienen su importancia, según el contexto histórico en el que vivieron, pero personalmente admiro a los turdetanos; un pueblo fascinante,  autóctono, que tuvo repercusión mundial en su tiempo y sus grupos escultóricos, son los mas importantes de la antigüedad en el occidente conocido.
 
 “son considerados los más cultos de los iberos, ya que conocen la escritura y, según sus tradiciones ancestrales, incluso tienen crónicas históricas, poemas y leyes en verso que ellos dicen de seis mil años de antigüedad”. Estrabon, geógrafo e historiador griego s. I d.C.
Los turdetanos o tartesio turdetanos,  son los continuadores de la cultura tartesica , que fue destruida por los fenicio punicos, como venganza por el apoyo de Tartessos a los focenses en la batalla de Alalia en el siglo VI a.C.  Su cultura se desarrolla a partir de la segunda mitad del siglo VI a.C. hasta la Roma republicana, tenian una sociedad enmarcada en un contexto cultural y económico muy amplio, en una red de relaciones comerciales y políticas que abarcaban el norte de África y el Mediterráneo central.
Los baluartes económicos mas importantes fueron las minas y la manufactura de joyas, (fibula de Bujalance- Cañete) útiles, armas, conocían el trillo y el arado, importado por Cartago. Las minas eran de propiedad privada. Los productos agropecuarios y pesqueros también son de gran relevancia.
 No existe una opinión uniforme sobre su estructura económica, algunos historiadores hablan de concentración de la tierra en pocas manos, poseían una nobleza militar, otros hablan de dispersión de la misma. La gran cantidad de monedas aparecidas de cecas o casas de la moneda, como la de Obulco, representando en el reverso de las piezas, las labores agrícolas, hacen creer en el pago de jornales, para la recolección de las cosechas, además de la necesidad de un monetario propio, con los mismos valores en todas las cecas, hacen suponer una intensa actividad comercial.
El hallazgo de numerosas fusayolas (pesas de telar), nos hablan de la existencia de una gran industria textil.
Un apartado muy importante es la industria cerámica, morfológicamente similar a los tipos griegos y fenicios, utilizada para la exportación de aceite, vino y “garum” , preparado de pescado, destaca la cerámica ornamental por su belleza, única entre los iberos, decorada con finos trazos de color ocre, con motivos geométricos, circulares, e.tc
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Los turdetanos viven en ciudades, amuralladas, situadas en puntos estratégicos, de fácil defensa, impresiona su mortero similar al cemento actual, que aun en día perdura, (murallas de Ategua).Las ciudades turdetanas están estructuradas como las “polis” griegas, con sus magistrados, militares, sacerdotes, a veces dominados por un reyezuelo, como Culchas. La red de caminos comunica, sus mas de 200 ciudades, desde Ossonoba (Faro, Portugal), hasta Obulco (Porcuna), 400 km. aprox.
El ejercito esta comandado por sus reyes y nobles, uno pereció en el asedio de Ategua, esta bien equipado y adiestrado, el armamento ibero esta tan bien diseñado, que los romanos lo adoptan, el gladius hispaniensis,  la caballería, muy poderosa, hizo estragos en las guerras de Viriato contra Roma, también reclutaban mercenarios, como los celtiberos,  en el grupo escultórico de cerrillo blanco (Porcuna), aparecen varios guerreros iberos, completamente equipados, con falcatas, espada corta, soliferras, lanzas sin asta, “solo de hierro”.
El turdetano era un pueblo religioso, se conservan extraordinarios santuarios, como el de “torreparedones”, sabemos por Estrabon del situado en Gadir (Cádiz) dedicado a Hércules, las deidades son en la mayoría de los casos importadas por los fenicios y cartagineses. La arqueología ha descubierto numerosas ofrendas y exvotos, que los fieles donaban, para recibir a cambio la curación de múltiples dolencias. Alrededor del santuario crece una ciudad, para atender a los numerosos peregrinos.
 Las necrópolis turdetanas que han aparecido son de incineración, colocándose las cenizas del difunto en una urna, tapada con un cuenco, alrededor se disponían otras jarras de diferente tamaño y en el caso de los guerreros sus armas, dobladas para que nadie las pudiera usar, generalmente están en túmulos excavados en la tierra, o piedra, necrópolis de Osuna, tapadas con grandes piedras de arenisca, este año debido a las fuertes lluvias, apareció en Arjona, una urna funeraria, decorada con guerreros.
Los iberos colocaban cerca de las necrópolis, todo tipo de esculturas, como por ejemplo, el león de Bujalance, anagrama de esta asociación.
El arte forma parte de este pueblo tan moderno y cultivado, un arcaicismo orientizante predomina en la mayoría de las obras, representación animalistica, mitológica y humana, los primeros hallazgos de esculturas se producen a finales del s. XIX, apropiandose el museo del Louvre de una extensa colección, es allí donde Picasso fascinado por la intemporalidad del arte ibero comienza a plasmarlo en sus obras, como en “Las señoritas de Avignon” .
En el museo arqueológico de Jaén, podemos admirar el grupo escultórico de Cerrilo Blanco, Porcuna, visita obligada para todo amante de la historia y el arte.


La historia de los turdetanos comprende 500 años, se divide en tres epocas, resumo brevemente su historia.
Iberico antiguo mediados del siglo VI a.C. hasta el  siglo V; Tiene muchas reminiscencias de esa fuerte carga orientalizante, pero al mismo tiempo incorpora los elementos griegos procedentes no sólo de la colonización griega de la zona catalana, sino también de la presencia griega en la zona del Levante y andaluza. Se integran los elementos característicos de la colonización púnica.
Iberico Pleno: fines del s. V a finales del s. IV. Fue en este momento en el que la cultura ibérica manifiesta sus rasgos culturales históricos. Es el periodo de mayor apogeo de dicha cultura. Finalizado el IV, y durante el III, entra en una fase de crisis que coincide con los periodos que arqueológicamente están peor documentados, en el 237 a.C. Amilcar Barca llega a la Turdetania con proposito de adueñarse de la riqueza minera, los reyes turdetanos oponen resistencia, pero al final aceptan al “aliado” cartagines, que funda la ciudad de Akra-Leuke, la actual Alicante. Termina esta fase con la llegada de los romanos a la P.Ibérica y que da lugar a la llamada
Baja epoca iberica, que se desarrolla desde finales del siglo III y principios del II hasta el siglo I a.C. Es el momento en el que la cultura ibérica recibe todos los influjos del mundo romano (la romanización), y difiere culturalmente esta última etapa bastante de los anteriores,